miércoles, 26 de octubre de 2011

EL CRÉDULO ENAMORADO.


 Un muchacho de ciudad
se enamoró un buen día
de una chica montaraz
que también a él quería.

    La muchacha pueblerina
de aerofagia padecía
y al oir hablar de amor
muy nerviosa se ponía,
tanto que para su horror,
los pedos se le salían.

    El chico, algo escamado,
a un amigo consultó
y éste, que era un guasón,
y un bromista redomado,
le dijo sin disimulo:
"que la gente de aquel pueblo,
en cuestiones del amor,
se expresaban con el culo".

    El mozo que se creía
un experto en el amor,
delante de la zagala,
su culo blanco sacó
y ante sus ojos asombrados
pata abajo se cagó.

Moraleja, en cuestiones del amor, no te fíes ni de tu vieja.

lunes, 17 de octubre de 2011

SOY.


Soy la piedra en el camino
con la que todos tropiezan;
soy esa mancha en el traje
que te pones en la fiesta.

Soy la hiel de tus arcadas
cuando llegas de resaca;
soy el calor en la zanja,
si trabajas a pico y pala.

Soy el regocijo de un niño
en una feria encantada;
soy la mirada del pobre,
contemplando la abundancia;

Soy el dolor del que llora
la pérdida de su amada,
soy los brindis y alegrías
si la lotería ganas.

Soy el canto acompasado
del pájaro cuando anida;
yo soy lo bueno y lo malo,
porque en fin, yo soy la vida.

viernes, 7 de octubre de 2011

LA JUVENTUD Y EL TIEMPO.


   Parece que será eterna, 
la juventud,
y, entre dimes y diretes,
requiebros y sonsonetes,
te llega sin darte cuenta, 
la senectud.

    Que al mundo comerse puede,
piensa el joven en su inconsciencia
más, sin ninguna clemencia,
todo queda como debe:
el mundo siendo más mundo
y el vigor en decadencia.

    Porque la ley natural
del hombre es hacerse viejo,
si es que cuida su pellejo,
y todo siga tal cual.

   Y como dijo aquel sabio,
pensando en buenos momentos:
"el mal de la juventud,
tiene cura con el tiempo".

martes, 4 de octubre de 2011

LA DEUDA Y LOS MERCADOS.

 De España y su solvencia
no se fian los mercados;
esto está ya más quemado
que las Fallas de Valencia.


    Que si es la culpable Irlanda,
Según Rajoy....Zapatero:
la culpa es del dinero
y los bancos que lo guardan.


   Por eso habría que hacer
lo que dijo Cantoná:
Hasta que vuelva a prestar
en el banco...¡ni un papel!