lunes, 2 de agosto de 2010

ILUSIÓN DE VERANO

Que envidia me da ese mar
que tu cuerpo acarició,
aquella noche de julio
en que hacía tanto "caló".

LLegaste al chiringuito
y pediste dos refrescos
y un baso de agua muy fría
que bebiste en "na" de tiempo.

Pero marchaste a tu tierra
y yo me quedé aquí,
sentadito en una silla
y acordándome de ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario